El mármol, una exquisita roca formada principalmente por calcita, surge como resultado de la actividad tectónica y volcánica. Durante su proceso de recristalización, tiene la capacidad de incorporar sustancias y minerales, dando origen a una extensa paleta de colores y tonalidades, incluyendo mármoles translúcidos, como el ónix.

Estas piedras nobles encuentran su propósito en revestimientos de muros, suelos, tableros de baños y, según el criterio del diseño, en una variedad de acabados. El mármol no solo añade una dimensión de elegancia y sofisticación a los espacios, sino que también proporciona un toque único y atemporal gracias a su naturaleza intrínseca y su rica historia geológica. Su versatilidad estética y funcional lo convierte en una elección apreciada en el diseño de interiores, donde su presencia resalta la belleza natural con un toque de lujo.

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